La ozonoterapia es una estrategia terapéutica que utiliza ozono, un gas natural compuesto por tres átomos de oxígeno, para influir en diversas vías metabólicas y procesos biológicos del organismo e impulsar su proceso natural de curación.
Esta terapia se ha utilizado y estudiado por más de un siglo, y sus efectos beneficiosos han demostrado ser consistentes para tratar infecciones, heridas y múltiples enfermedades.
¿Cuáles son sus principales beneficios?
1. Contribuye a la prevención del daño celular y envejecimiento prematuro, gracias a su capacidad para aumentar la producción de enzimas antioxidantes como la superóxido dismutasa y la glutatión peroxidasa, las cuales ayudan a neutralizar los radicales libres y reducir el estrés oxidativo en el cuerpo.
2. Apoya el tratamiento de infecciones bacterianas, virales y fúngicas, gracias a su capacidad para penetrar en la membrana celular de los microorganismos y desestabilizar sus estructuras.
3. Respalda el tratamiento de afecciones inflamatorias (como la artritis) y enfermedades autoinmunes, como resultado de su capacidad para estimular y regular la actividad del sistema inmunológico.
4. Apoya los procesos de desintoxicación del cuerpo al aumentar su actividad antioxidante, estimular el sistema inmunológico y mejorar la circulación sanguínea.
5. Apoya el tratamiento del cáncer a través de diferentes mecanismos, incluyendo la estimulación del sistema inmunológico, la modulación de la inflamación y la mejora de la oxigenación tisular.
Además, estudios han demostrado que la ozonoterapia puede ser un tratamiento eficaz para:
- Revertir el daño al tejido cerebral después de un derrame.
- Reducir el riesgo de ataques cardíacos repetidos.
- Tratar las úlceras en pacientes diabéticos.
- Aliviar el dolor lumbar.
¿Cómo se utiliza la ozonoterapia?
Existen diversas técnicas para administrar ozono, adaptadas a diferentes condiciones y necesidades médicas.
Insuflación rectal: una mezcla controlada de ozono y oxígeno se introduce en el colon a través de un catéter. Esta técnica se utiliza para tratar una variedad de trastornos gastrointestinales, como la colitis ulcerosa, la enfermedad de Crohn y otras afecciones inflamatorias del intestino.
Insuflación vaginal: se utiliza para tratar infecciones como la vaginosis bacteriana y las infecciones por hongos, al tiempo que promueve la salud y el equilibrio de la microbiota vaginal.
Aplicación percutánea: se utiliza en el tratamiento de úlceras cutáneas y heridas crónicas para acelerar la cicatrización, reducir la inflamación y prevenir infecciones.
Inyección intramuscular: se emplea para tratar problemas alérgicos y autoinmunes, así como para mejorar la circulación y promover la desintoxicación celular.
Infiltración intraarticular: se utiliza en el tratamiento de enfermedades reumáticas y degenerativas, como la osteoartritis y la artritis reumatoide, para reducir el dolor, la inflamación y mejorar la movilidad articular.
Inyección intravertebral: se utiliza en casos de hernias discales y otras afecciones de la columna vertebral para reducir la compresión de los nervios, aliviar el dolor y mejorar la función neurológica, evitando en muchos casos la necesidad de cirugía invasiva.
Autohemoterapia: se extrae una cantidad de sangre del paciente que se mezcla con ozono y se vuelve a inyectar en el cuerpo del paciente. Tiene importantes efectos oxigenantes y antiinflamatorios que combaten numerosas enfermedades y promueven la salud integral.
El caso de Jessica
Cuando Jessica llegó a nuestra Consulta Integrativa tenía una variedad patologías como Síndrome de Asia y Síndrome de Cushing, acompañados de prediabetes, tensión baja, presíncope vasovagal, hipotensión ortostática, además de bacterias infecciosas en sus pulmones, estómago y vías urinarias.
De mano del equipo médico de SaludDar, Jessica empezó un tratamiento que incluía un Plan de Desintoxicación Integral, nebulizaciones, suplementación guiada y, por supuesto, nuestra Gran Autohemoterapia con Ozono.
Tras iniciar este tratamiento, su cuerpo activó sus mecanismos naturales de desintoxicación y curación, y después de solo un mes y hasta la fecha los cambios han sido notables:
- Superó los dos síndromes
- La infección bacteriana desapareció
- Mejoró la salud de su colon
- Perdió 10 kilos de inflamación
- Recuperó su energía vital
La combinación del conocimiento del equipo médico, la disciplina de la paciente y las diferentes terapias utilizadas, destacando la Ozonoterapia, fueron las claves para el éxito del tratamiento de Jessica.
Aquí puedes conocer su TESTIMONIO COMPLETO.
Si estás experimentando síntomas que no mejoran, es momento de buscar una alternativa de tratamiento enfocado en la restauración de tu salud integral.
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